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Insomnio: qué es y cómo evitarlo

El insomnio es la dificultad para dormir, conciliar el sueño, mantenerlo o despertar de forma precoz con una sensación de sueño poco reparador que genere un notable malestar o interferencia con las actividades sociales y laborales.

Si una persona no puede conciliar el sueño o se despierta de manera frecuente, va a dormir menos horas de lo que necesita. Al dormir menos, generalmente, no tiene un sueño reparador y puede notar la falta de descanso durante el día. “Puede ocurrir que incluso durmiendo un número de horas adecuadas sin costarle iniciar el sueño o mantenerlo, el paciente tenga la sensación de que no ha dormido bien, de que no ha descansado”, explica el Dr. Esteban Rosero, coordinador Médico del Centro de Salud de Cheste.

Por lo tanto, el insomnio se puede definir como dormir un menor número de horas de lo que se necesita, con una escasa cantidad y calidad del sueño, teniendo la sensación subjetiva de que no se ha dormido bien y de que afecta en la actividad habitual.

¿Es lo mismo dormir mal que tener insomnio?

Según indica el Dr. Esteban Rosero, el punto clave es la queja que tiene el paciente de no haber descansado. Por lo tanto, si se duerme mal por dormir poco tiempo o por mala calidad del sueño, estamos ante un caso de insomnio. “Quizás tengamos que resaltar que si se tiene problemas para dormir de forma puntual una noche por cambio de las condiciones de donde dormimos como pueden ser el ruido, la luz, diferente cama u otros estímulos, no podemos decir que padecemos insomnio. Pero si las condiciones son óptimas y de forma reiterada no podemos dormir bien y tenemos dificultad para dormir, entonces sí se puede hablar de insomnio”, apunta el especialista del Centro de Salud de Cheste.

¿Cuántas horas son necesarias dormir?

La OMS dice que se debe dormir como mínimo seis horas. Si dormimos menos de seis horas, lo normal es que notemos los efectos durante el día por la falta de sueño. No obstante, las horas de sueño necesarias también dependen de la edad. Por ejemplo, para un anciano puede ser suficiente dormir seis horas, pero un niño necesita más horas de sueño. Por otra parte, cada persona necesita unas horas de sueño determinadas dependiendo de sus características, por lo que dos personas de la misma edad pueden necesitar un número de horas distintas para sentir que han descansado.

¿Las horas de sueño van cambiando a medida que avanza la vida?

Las horas de sueño necesarias varían sobre todo por la edad. En este sentido, la National Sleep Foundation (NSF) recomienda que se duerman las siguientes horas:

  • Recién nacidos (0-3 meses): 14-17 horas.
  • Lactantes (4-11 meses): 12-15 horas.
  • Niños pequeños (1-2 años): 11-14 horas.
  • Preescolares (3-5 años): 10-13 horas.
  • Niños en edad escolar (6-13 años): 9-11 horas.
  • Adolescentes (14-17 años): 8-10 horas.
  • Adultos más jóvenes (18-25 años): 7-9 horas.
  • Adultos (26-64 años): 7-9 horas.
  • Adultos mayores (65 años y más): 7-8 horas.

En pacientes más ancianos, 5-6 horas pueden ser suficientes para tener un sueño reparador.

¿Hay alguna predisposición para sufrir insomnio?

Sí, hay numerosos factores que favorecen el insomnio. Tal y como detalla nuestro especialista, algunos son no modificables, como la edad, el sexo, factores familiares y genéticos. En otros casos sí se puede intervenir, como por ejemplo cuando la causa está relacionada con el estilo de vida, el estrés y los horarios de trabajo. El especialista recuerda que el insomnio es más frecuente en mujeres, a las que afecta un 5 % más que a los hombres. Además, también se ha relacionado el insomnio con un bajo nivel socioeconómico.

¿Cuáles son los síntomas característicos del insomnio?

La somnolencia diurna y el cansancio son los principales síntomas del insomnio. Como consecuencia, también aparecen otros trastornos: 

  • Dificultad de concentración.
  • Disminución del tiempo de reacción.
  • Disminución del aprendizaje.
  • Alteraciones del comportamiento y de las emociones, como irritabilidad.
  • Tendencia a la depresión.

Estos síntomas del insomnio pueden producir un aumento de probabilidad de errores y accidentes, así como la aparición a largo plazo de enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, obesidad y diabetes. En niños, puede producir alteraciones del crecimiento.

Causas del insomnio

Las causas del insomnio son muy numerosas. Muchas se deben a enfermedades que afectan al sueño, como las respiratorias, cardiacas, neurológicas o los problemas urinarios. También hay que tener en cuenta las causas de origen psiquiátrico, puesto que producen un gran número de alteraciones del sueño.

Por otro lado, los malos hábitos de sueño, los turnos de trabajo o el estrés pueden ser causas no patológicas que afectan al sueño. A esto hay que añadir el consumo de excitantes, como el café, el té o ciertos fármacos que pueden producir insomnio.

¿Cómo se diagnostica el insomnio?

El diagnóstico del insomnio se realiza principalmente a través de la entrevista clínica, en la que el paciente nos dará información sobre el número de horas que duerme, qué tipo de insomnio tiene y la sensación de malestar que le produce la falta de sueño.

Tratamiento del insomnio

La curación o control del insomnio va a depender de forma importante de la causa que lo produce y del tipo de insomnioAsimismo, el insomnio se puede prevenir utilizando unas medidas de higiene del sueño que detalla el Dr. Esteban Rosero:

  • Se recomienda acostarse y levantarse a la misma hora la mayoría de las noches.
  • Cuidar el entorno relacionado con el sueño: evitar luces y sonidos molestos.
  • Evitar cenas copiosas.
  • No hacer ejercicio intenso después de las 7 de la tarde.
  • No realizar actividades mentales que supongan esfuerzos ni utilizar pantallas antes de acostarse.
  • Hacer actividades relajantes antes de acostarse.
  • Evitar las siestas superiores a 20 minutos.
  • Establecer rutinas antes de acostarse, como cepillarse los dientes, ducharse o tomar bebidas calientes.
  • No demorar en irse a la cama.
  • Utilizar la cama sólo para dormir, evitando ver la televisión o leer libros.
  • Evitar tomar alcohol 2-3 horas antes de dormir.
  • No tomar bebidas excitantes como café o té.

Si tienes dificultades para dormir, o sospechas que puedes estar ante un episodio de insomnio. Desde Hospital de Manises estaremos encantados de atenderte y proporcionarte las mejores soluciones según tu caso y tus necesidades. ¡Contacta con nosotros!